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domingo, 10 de julio de 2011

Galletas de huevo y mantequilla


Hoy os traigo una nueva receta para galletas que es perfecta para decorar con fondant. Son muy resistentes y no se deforman en el horno, además presentan un acabado completamente liso en superficie que es lo que siempre buscamos a la hora de decorar.
La textura y el sabor son completamente diferentes a los de las galletas de mantequilla, os invito a probarlas y ya me contareis.


 INGREDIENTES:
  • 250 gr de mantequilla sin sal.
  • 250 gr de azúcar glass.
  • 1 huevo grande
  • 650 gr de harina
  • Un chorro de leche
  • Aroma de vainilla
PREPARACIÓN:

Lo más importante es que todos los ingredientes estén a temperatura ambiente, la mantequilla ha de estar en punto de "pomada".
  • Batimos la mantequilla con unas varillas durante unos 5 minutos, si utilizamos unas varillas eléctricas nos ayudaremos de una lengua de silicona para bajar la mantequilla adherida a las paredes y facilitar el batido. Con esto conseguiremos que la mantequilla se blanquee y aumente su volumen.
  • Sin dejar de batir vamos incorporando el azúcar, esta debe estar tamizada para facilitar su incorporación. Seguimos batiendo hasta que la mezcla de mantequilla y azúcar sea totalmente homogénea.
  • Añadimos un chorro de aroma de vainilla, aproximadamente dos cucharadas soperas y el huevo previamente batido, seguimos batiendo hasta que este completamente incorporado.
  • Ahora es el momento de ir añadiendo harina, la masa irá cogiendo cuerpo, por lo que en este momento cambio las varillas por las palas amasadoras, es probable que os carguéis la máquina si seguís con las varillas, si no tenéis palas amasadoras lo mejor es que hagáis un volcán de harina en la encimera y volquéis sobre el la mezcla para seguir amasando con las manos.
  • Si habéis optado por las palas amasadoras iremos incorporando la harina a cucharadas, ayudándonos siempre de la lengua de silicona para ir bajando lo que se nos pegue a las paredes.
  • A medida que incorporemos casi toda la harina veremos que la masa deja de ligar por lo que en este momento añadiremos el chorro de leche, mejor poco a poco para que veamos cuanta leche necesita nuestra masa para ligarse. Si nos pasamos con la leche será cuestión de añadir algo mas de harina.
  • En este momento sacamos nuestra masa de la batidora, espolvoreamos un poco de harina sobre la mesa de trabajo y amasamos para formar una bola, no es necesario amasar demasiado, formaremos una bola con facilidad.
  • Yo divido la masa en unas 4 porciones para que me sea mas sencillo manejarla después, y las guardo bien envueltas en film de cocina o en bolsas de congelar dentro de la nevera al menos 3 horas.
  • Pasado este tiempo, sacamos una de ellas de la nevera, la templamos un poco con las manos para que se ablande y colocamos sobre la encimera una lamina de papel de hornear. De esta forma estiramos la masa con un rodillo sin miedo a que se nos pegue a la encimera. Dejamos una lamina de aproximadamente medio centímetro de grosor.
  • Colocamos otra lamina de papel antiadherente sobre la bandeja del horno, cortamos nuestras galletas y las colocamos sobre ella.
  • Este paso es muy IMPORTANTE, una vez que tengamos las galletas cortadas sobre la bandeja debemos meter la bandeja en la nevera al menos 15 minutos, en este momento enciendo el horno a 180º y aprovecho esos 15 minutos para que esté bien precalentado. La importancia de este paso es que al llevar mantequilla las galletas pueden tender a deformarse, pero si las horneamos bien frías no corremos ese riesgo, os aseguro que nuestra galleta no se deformará en absoluto.
  • Metemos en el horno como os he dicho a 180º entre 10 y 15 minutos, siempre con el horno precalentado. En cuanto veamos que los bordes de la galleta empiezan a coger un color dorado están listas.
  • Sacamos la bandeja y las dejamos reposar sobre ella un máximo de 5 minutos, lo justo para que se enfríen ligeramente, a continuación las pasamos a una rejilla para que se enfríen por completo, es importante que el aire circule bajo ellas durante el enfriado, no las dejéis enfriar en la bandeja del horno.

Y con esto tendréis listas vuestras galletas de mantequilla y huevo para decorar, podéis conservarlas perfectamente bien guardadas en un recipiente hermético hasta el momento de decorarlas, y aunque parezca mentira yo las he tenido 2 semanas y estaban como el primer día.


 Espero que esta receta os sea de utilidad, es muy sencilla de preparar. Os animo a intentarlo y a que me contéis que os ha parecido. Las he utilizado para los nombres en galleta y han quedado genial, ahora como veis, tengo unos osos esperándome XD
¡Hasta pronto!

3 comentarios:

  1. Probaremos la receta, la verdad es que resulta muy tentadora, aunque hace un calorrrr, pero no me resisto, la probaré , un saludo de Ele....
    http://tartaselena.blogspot.com/

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  2. Yo precisamente he hecho la semana pasada unas galletas como las tuyas de osito, pero la masa se me ha deformado con el calor y eso que las metí en la nevera otra vez antes de hornear...si es que con este calor...la próxima vez voy a probar tu receta a ver qué tal!!! Saludos!

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  3. Hola Darío gracias por compartir tu receta, la probaré, saludos.

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